Wednesday, September 03, 2008

Travelling Vertical



Kurt Cobain: sobre un hijo
Director: AJ Schnack
Año: 2007


“El 6 de abril de 1995 Kurt Cobain vocalista de la banda Nirvana fue encontrado en su casa en la ciudad de Seattle muerto por un disparo de escopeta en el rostro”. Recuerdo bien que era de mañana cuando lo decían y lo primero que pensé fue: nunca tendré la oportunidad de verlos en vivo.

La noticia causo conmoción en el mundo de la música porque Cobain para ese entonces se había convertido en un músico, compositor e interprete formidable. La música de Nirvana no abanderaba a una generación, se enfoco en cada adolescente, joven y adulto marginado por la sociedad. Formando un vinculo entre Nirvana y sus múltiples seguidores, a través de su música, que nunca se rompería y renovado constantemente al pasar los años, pues no hay época donde todas las personas se sientan adaptadas al mundo, siempre habrá seres humanos que por motivos emocionales y entornos sociales, estén desapegados y sean extraños al mundo. Situación que nada tiene que ver con el movimiento emo, porque me refiero a personas sin poses, modas y pertenencia a grupos sociales, además de que a quienes me refiero son cada día menos en número. Debido a eso Nirvana representado por su líder es una de las mejores bandas de música de la historia, estigmatizada por el frágil temperamento de su vocalista.

En el 2005 después de diez años de la muerte de K. Cobain, el director de cine Gus Van Sant, llevo al cine la vida de Cobain en un filme llamado Last days. Donde similar al titulo, la película supone narrar los últimos días de la vida de Kurt Cobain; en un tono de ficción, porque el personaje principal (el supuesto Cobain) en la película es llamado Blake.

Tres años y unos meses después, en la ciudad se exhibió otra película sobre el mítico personaje. El filme tiene como mayor logro: un guion que es la voz de Kurt Cobain, grabada para una entrevista dos años antes de su muerte. Así que a lo largo de 97 minutos de película, escuchamos la historia de Cobain contada por él mismo. Hecho histórico para quienes admiramos su música y nunca tuvimos la oportunidad de verlo en vivo; y que guardamos el deseo de que se hubiera alejado de todo, como lo expresa en la cinta, pero no de la forma en que lo hizo.

Kurt Cobain: sobre un hijo, no es una obra suprema del cine, sin embargo su emotividad, el soundtrack y las imágenes trabajadas sin pretensión que solo buscan acompañar las ideas de K. Cobain, la convierte en una obra que bien vale la pena revisar; se sea o no un paria, seguidor de nirvana o ambas cosas. Porque guste o no, es sobre un personaje universal que ha construido nuestra historia y son pocos quienes llevan durante su vida esa carga.

9 comments:

Niño Alex said...

gracias javier por tu comment y que chido qeu te latio mi blog, ojala no te dejes de darte tus vueltecitas, saludos.

Anonymous said...

Me parece que resaltas demasiado las virtudes de Nirvana. Considero que su éxito y la categoría de mito que Kurt Cobain ostenta son producto de la mercadotecnia más que fruto de su propuesta musical. Ciertamente que durante los primeros noventa muchos jóvenes marginados se identificaron con el cóctel entre noise, heavy, garage, punk... Sin embargo, y de forma paralela, otras alternativas musicales como el Death y Thrash se oponían al mainstream del grunge, el groove, e incluso el stoner imperante en esa época y erigirieron una contracultura que se oponia al régimen establecido y de paso servían como voceros de una generación exasperada del mundo lleno de contradicciones. Posterior al movimiento hardcore del 82, sólo el cisma metalero de finales de los 80 y principios de los noventa volvieron a transgredir a la industria de la música y generaron movimientos rebeldes.

Comprendo que te guste Nirvana. Por ahí yo disfruto mucho un par de sus álbumes -especialmente el directo, pero de eso a considerarlos de las mejores bandas de la historia discrepo mucho. Pienso que Nirvana y su líder fueron el último gran ejemplo de cómo la industria se empeña en crear ídolos, modas y acaparar géneros y corrientes completas y convertirlos en máquinas de hacer dinero, una pena.

Lo mismo pasó en su momento con el punk y el post punk y new wave... la mano invisible de la industria es el antimidas...

Javoc said...

gracias por tu comentario wiliam. lastima que no te guste nirvana tanto como a mi. pero en cuestion de gustos no hay nada que hacer.

no pienso que nirvana y su lider fueran el ultimo monigote de la industria. si tu piensas eso esta bien.


saludos!

Anonymous said...

No argumentas el por qué. Yo expuse mi puntos. Saludos igual.

Los gustos se respetan, pero los hechos concretos se confirman o se refutan. Sí me gusta Nirvana, aunque como bien dices no tanto, igual me pasa con Soundgarden, Pearl Jam y Alice in Chains. Sin embargo, para hacer honor a la verdad, su movimiento de transgresor no tuvo nada. De eso a que la música sea disfrutable, pues la verdad Rockean

Javoc said...

tienes razon, acerca de los hechos.

"La música de Nirvana no abanderaba a una generación, se enfoco en cada adolescente, joven y adulto marginado por la sociedad. Formando un vinculo entre Nirvana y sus múltiples seguidores, a través de su música, que nunca se rompería y renovado constantemente al pasar los años, pues no hay época donde todas las personas se sientan adaptadas al mundo, siempre habrá seres humanos que por motivos emocionales y entornos sociales, estén desapegados y sean extraños al mundo.Debido a eso Nirvana representado por su líder es una de las mejores bandas de música de la historia, estigmatizada por el frágil temperamento de su vocalista."

Anonymous said...

El mismo efecto que los emos, salvando las distancias musicales, la manifestación y sus implicaciones sociales son las mismas. Que dicho sea de paso, el grunge tomó mucho del emo, el de los ochenta, aquél de bandas como fugazi cuyo líder fue también parte del movimiento hardcorero.

Los jóvenes de los noventa se sentían marginados, pero hay una distancia entre el razonamiento y la acción y el actuar pasivo pensandose incomprendido o alejado del mundo. En todo caso de trata de una alienación. En otra parte de la misma América imperial grupos de reales marginados, incompendidos en incoformes con carácter iconoclasta emprendieron movimientos musicales con un espíritu de acción, rechazo a la industria y la pasividad de la generación x.

Nirvana se enfocó en venderle discos y hacer videitos a toda esa juventud enajenada. Lo cual no es malo, suenan bien y saben como prender a la raza. Su música es un grito de exasperación y hastío que engloba las inquietudes adolescentesy las manifiesta con crudeza, un híbrido interesante que pasó a convertirse en moda y que la industria a explotado ad nauseam. La cuestión es que tu reseña exagera o le otorga caraterísticas sociológicas que ni el grunge ni Nirvana jamás tuvieron.

Javoc said...

va.
y saliendonos un poco del tema. ¿que necesita una banda de rock para ser considera una de las mejores dentro de la historia?

Anonymous said...

En mi opinión, para considerar a una banda de las mejores de la historia simple y sencillamente se necesita que te guste mi hermano. Cada uno tiene su corazón latiendo a diferentes ritmos de rock. Las implicaciones históricas-sociológicas son haria de otro costal menos subjetivo.

Por cierto. En canal Once pasan por las noches documentales sobre las bandas de rock de antaño. El otro día toco turno a Jethro Tull, te lo recomiendo bastante.

Javoc said...

orale que bien, no sabia. los de jethro tull son una de esas bandas...

gracias por tu comentario.